lunes, 26 de noviembre de 2007

DIALOGO DE UN MAESTRO CON SU ALUMNO SOBRE LA GUAYANA ESEQUIBA



INSTITUTO DE ESTUDIOS FRONTERIZOS

DIALOGO DE UN MAESTRO CON SU ALUMNO
Sobre
LA GUAYANA ESEQUIBA
A= Alumno
M= Maestro

A. ¿Por qué el Estado Bolívar es el más grande de Venezuela?
M. Pues si supieras, no es nada en comparación con lo que fue antiguamente cuando era La Provincia de Guayana.
A. ¿Antes de que se le separara el Estado Amazonas?
M. ¡Mucho antes! Hace siglos abarcaba desde los llanos del Casanare, hoy colombianos, hasta el Atlántico por el Este; y por el Sur hasta el río Amazonas.
A. ¡Huy! ¡Era grandísimo, casi increíble!
M. Ahora parece de leyenda, como la del Hombre Dorado, o simplemente El Dorado, la leyenda del cacique indígena que untado el cuerpo de aceite y cubierto de oro, se sumergía en una gran laguna a cuya orilla se levantaba la ciudad de Manoa, toda de oro. En un tiempo los españoles creyeron que El Dorado se hallaba en los llanos entre el río Pauto, más allá del Casanare, también afluente del río Meta, y el Papamene o Caquetá que desemboca en el río Amazonas.
A. ¿Pero eso tiene que ver con nuestra GUAYANA ESEQUIBA?
M. ¡Claro que sí! Verás. Resulta que el capitán español Antonio de Berrío estaba casado con doña María de Oruña, sobrina del fundador de Bogotá, Gonzalo Jiménez de Quesada. Pues bien, por su matrimonio con la sobrina de Jiménez de Quesada heredó Berrío de aquel conquistador, la Gobernación de El Dorado con su territorio situado entre el Pauto y el Papamene o Caquetá.
A. ¿Y encontró Berrío El Dorado en aquellos llanos?
M. Ahí está la cuestión. Como no lo encontró allí, siguiendo las indicaciones de los indígenas o naturales fue buscándolo y buscándolo en expediciones arriesgadísimas hasta que bajando por el Orinoco llegó a la boca del Caroní llamado por nuestros aborígenes Caronicuar que significa "salto del agua".
A. ¡Ah! ¡Llegó a Guayana!
M. ¡Exactamente! Esa es precisamente la Guayana, la tierra comprendida entre el bajo Caroní y el Orinoco. Lo que pasa es que se llamó Guayana a toda la Gobernación del Dorado reservada a Berrío.
A. ¿También al territorio llanero situado entre el Pauto y el Papamene?
M. ¡Por supuesto! La gobernación de Berrío al principio abarcaba esos llanos, pero ese conquistador, después de llegar a Guayana argumentó que la provincia de El Dorado llegaba al Atlántico por el Este y al Amazonas por el Sur.
A. ¿Y qué razón dio?
M. Dijo que el Pauto cambia más adelante de nombre y se llama Meta, y éste es después llamado Orinoco. Así también que el Papamene más adelante se llama Caquetá y a su vez cambia de nombre más abajo y recibe el nombre de Amazonas. Por consiguiente, que su gobernación abarcaba desde los llanos situados más allá del Casanare hasta el Atlántico por el Este y hasta el Amazonas por el Sur.
A. ¡Qué vivo!
M. Lo que pasa es que como el Rey de España deseaba a todo trance que Berrío descubriera El Dorado de nuestra Guayana, le concedió toda esa inmensa gobernación situada entre los ríos Pauto-Meta-Orinoco por el Norte y los ríos Papamene-Caquetá-Amazonas por el Sur.
A. Nunca me habría imaginado que nuestra Guayana era tan grande.
M. Y abarcaba también a Trinidad porque Berrío convenció al gobierno español de que para la defensa de Guayana necesitaba esa isla y le persuadió de que en Guayana había más oro que en México y que en Perú. Estaba convencido de que nuestra Guayana con su inmenso y rico territorio sería un Virreinato más poderoso que el de esas dos regiones.
A. Pero a mí me han contado que también los ingleses le pusieron la vista a nuestra Guayana.
M. Así es. Resulta que unos documentos españoles sobre el descubrimiento de El Dorado fueron a parar a manos de Walter Raleigh. En esos papeles se describía El Dorado y la ciudad de Manoa, toda de oro; se decía que en Guayana todo era asombroso: que había indios sin cabeza, con los ojos, la nariz y la boca en el pecho; mujeres guerreras que para poder disparar las flechas se cortaban los senos así como otras fantasías. Raleigh se creyó todo eso y proyectó que con el oro de Guayana, Inglaterra haría otro imperio opuesto al español.
A. ¡Es una historia fantástica!
M. Todo lo de nuestra Guayana es fantástico. Desde entonces la codiciaron los ingleses. Berrío se hallaba en Trinidad en el pueblo de San José de Oruña que había fundado con su gente, cuando se presentó Raleigh con barcos bien armados, y disimulando una visita de cortesía lo apresó.
A. ¿Para qué?
M. Para que le enseñara el camino de El Dorado. Se lo llevó preso por el Orinoco hasta el Caroní, pero el viejo Berrío no soltó prenda, así que Raleigh decidió vengarse atacando a Cumaná. Esa fue su perdición porque los cumaneses le dieron una paliza de espanto y brinco de manera que tuvo que canjear a Berrío por unos prisioneros ingleses.
A. ¿Entonces Berrío se quedó en Cumaná?
M. ¡Qué va! Estaba convencido de que iba a descubrir El Dorado. Por eso se fue con su gente otra vez al Orinoco, cerca del Caroní, de manera que el 21 de diciembre de ese año 1595 fundó la ciudad de Santo Tomé de Guayana, capital de esa inmensa gobernación comprendida entre los ríos Pauto-Meta-Orinoco y los ríos Papamene-Caquetá-Amazonas. Si la comparas con el territorio que le ha quedado a Venezuela, verás que es muy pequeño ya que Colombia, Brasil e Inglaterra se llevaron grandes tajadas.
A. ¿Pero qué hizo Raleigh después de su derrota en Cumaná
M. Se la calló y escribió un libro fantástico, presentándose como el descubridor de Guayana siendo así que no pasó del Salto Cachamay, hoy parque de Ciudad Guayana. Pero ese libro de Raleigh sobre El Dorado difundió en Europa el conocimiento de nuestra Guayana, y entonces muchos pensaron: ¡Vamos a hacernos ricos en esa tierra! Así comenzaron las expediciones de los ingleses, de los franceses, de los holandeses, pero sólo a la costa, muy lejos del Orinoco. Cuando se dieron cuenta de que había sido fundada Santo Tomé de Guayana lanzaron contra ella ataques y más ataques. Los primeros en destruirla fueron los ingleses de Raleigh quien volvió dizque a descubrir la mina de oro. Al regresar a Inglaterra sin lograr su objetivo, le cortaron la cabeza.
A. ¿Entonces desapareció nuestra ciudad Guayana?
M. ¡No! Nuestros antepasados eran muy valientes y tenaces. Cada vez que les destruían la ciudad, la fundaban en otro sitio junto al Orinoco, hasta que la llevaron cerca de donde hoy están los Castillos de Guayana que fueron construidos para defender la ciudad y el río. A finales del siglo XVIII la trasladaron a la parte más angosta del Orinoco, en la Angostura. Es en esa ciudad llamada entonces Angostura y hoy Ciudad Bolívar, donde el Libertador reunió el Congreso en 1819 y pronunció uno de sus más famosos discursos.
A. Ya me doy cuenta de que los venezolanos de entonces sí sabían defender el territorio de la Patria.
M. Observa que eran tan valientes que a comienzos del siglo XVII cuando se enteraron de que unos holandeses se habían establecido en el río Corentín fueron hasta allí y los desalojaron. ¿Sabes dónde está el Corentín? Pues entre Guyana y Surinam. Todo ese territorio pertenecía a nuestra Guayana.
A. Con eso los holandeses abandonarían nuestro territorio...
M. ¡Lamentablemente no! Aprovechándose de las guerras que España tenía en Europa, los holandeses lograron establecerse al otro lado del Esequibo, y en los ríos Demerara y Berbice. Al terminar las guerras, España firmó con Holanda el Tratado de Münster en 1648. Por ese "tratado de paz" les dijo España a los holandeses: ¡bien! Les reconocemos los territorios que hasta ahora han ocupado, pero no más. Así les reconoció las posesiones del otro lado del Esequibo y Curazao.
A. ¿Y los holandeses cumplieron?
M. ¿Qué va! Al contrario, trataron de cogerse más terreno fundando unos pequeños establecimientos más acá del río Esequibo, en la costa, junto al río Pomerún.
A. ¡Eso no vale!
M. ¡Claro que no! Esa ocupación aunque era una parte muy pequeña de nuestra Guayana era ilegal. Es lo que se llama usurpación o robo. España nunca se lo reconoció a Holanda. Para impedir que los holandeses se apoderaran de más terreno, y para evangelizar a los indígenas, los misioneros capuchinos fueron fundando pueblos, unos con los aborígenes como Guasipati, Tumeremo, Caroní, Hurí etc. y otros con criollos como Upata y Barceloneta. También promovieron la construcción del Fortín del Curumo frente al río Potanamo afluente del Cuyuní; así lograron desalojar a los holandeses infiltrados y contribuyeron al desarrollo de nuestra Guayana sobre la base de la ganadería.
A. Y en la Independencia ¿hasta dónde llegaba nuestra Guayana?
M. Hasta el río Esequibo, fuera de unos pocos colonos aislados que se mantenían en la costa del río Pomerún. Esa era la situación cuando Holanda cedió a Inglaterra por el Tratado de Londres de 1814 sus colonias de Esequibo, Demerara y Berbice.
A. ¿Y el Libertador Simón Bolívar dejó tranquilos a los invasores del Pomerún?
M. ¡De ninguna manera! El gobierno del Libertador les dijo que o abandonaban ese territorio usurpado o se quedaban pero sometidos a las leyes de la República. Y en 1824 hizo saber al gobierno inglés que nuestro "bello y rico país limita por la Mar del Norte (Atlántico) por el río Esequibo".
A. Pero yo veo en el mapa de Venezuela que dice " Guayana Esequiba Zona en Reclamación".
M. De ninguna manera. En el gobierno del libertador Simón Bolívar les mando a decir a los pocos colonos ingleses que había en esa costa que desalojaran el territorio o se quedaran, pero sometidos a las leyes de la República de Venezuela.
Más aún en 1825, cuando se establecieron las relaciones diplomáticas con el Gobierno inglés se señaló entre otras cosas el límite de la Gran Colombia de la siguiente forma. "…este bello y rico país limita por la mar del norte (o océano atlántico) con el río Esequibo…" Lamentablemente no los desalojamos ni ocupamos esa zona, sino que la reclamamos porque Inglaterra nos la quitó.
A. ¿Cuándo?
M. Es una historia larga pero te la voy a resumir. De pronto vino al Esequibo un explorador alemán llamado Robert H. Schomburgk que se había puesto al servicio de Inglaterra. Se metió en nuestro territorio dizque sólo para investigar sobre las plantas, animales y minerales, pero lo que hizo fue poner postes (hitos) inventando linderos como si el territorio de la Guayana Esequiba fuera de Inglaterra y no de Venezuela. De paso realizó mapas fijando una frontera cerca del Orinoco como si ese territorio perteneciese a la Guayana Británica, y no a Venezuela.
A. ¿Y Venezuela se quedó callada?
M. ¿No! Protestó, protesto y protestó. Al principio Inglaterra disimuló; y hasta dijo que había ordenado quitar los postes levantados por el explorador alemán Robert H. Schomburgk, Pero cuando años después se descubrieron las minas de oro en El Callao , los ingleses decidieron agarrarse todo el territorio del Yuruari, incluidos los antiguos pueblos misioneros venezolanos de Tumeremo y Guasipati.
A. ¿No hubo entonces venezolanos con guáramo contra los ingleses?
M. Claro que sí. Los sucesores de Bolívar, de Páez, de Sucre, de Piar, de Urdaneta, ¿se iban a acobardar? Ahí tienes al General Domingo Sifontes quien detuvo a los invasores en el Dorado al desalojarlos y arriar la bandera inglesa, deteniendo al Inspector inglés Barnes y sus hombres a quienes mandó presos a Ciudad Bolívar en enero de 1895. Es lo que se llama "El Incidente del Yuruari" Venezuela se enfrentaba entonces a la mayor potencia del mundo: Inglaterra.
A. ¿Los Estados Unidos no contaban?
M. Todavía no, aunque ya era un país muy desarrollado. El lío entre Venezuela e Inglaterra no les gustaba porque podría suceder que Alemania interviniera a nuestro favor y los Estados Unidos querían reservarse este Continente para ellos. Entonces decidieron intervenir no fuera que Alemania que ya tenía muchos inmigrantes en el Brasil participara en el conflicto.
A. ¿Cómo intervinieron los Estados Unidos? ¿Mandando soldados?
M. ¡No! Eso habría traído la guerra a América. Fueron más vivos. Disimularon que protegían a Venezuela contra Inglaterra y declararon que en este Continente la voluntad de los Estados Unidos era la Ley. Es lo que se llamó la Doctrina Monroe, según la cual ningún país europeo podía en lo adelante establecer ni ampliar colonias en América. Aparentemente iban contra Inglaterra, pero en realidad tomaban en cuenta el expansionismo de Alemania. Por eso los Estados Unidos se arreglaron secretamente con Inglaterra de manera que ésta les dejó que dominaran a Cuba, Puerto Rico, el Caribe en general, así como Hawai y Filipinas en el Océano Pacífico. Mientras que los Estados Unnidos apoyaban a Inglaterra en la guerra de Suráfrica conocida como "La Guerra de los Boers"
A. ¿Y en nuestra Guayana Esequiba?
M. Es la historia más triste y lamentable. Aparentaron que protegían a Venezuela, pero se pusieron de acuerdo con Inglaterra: para que ésta se quedara con la Guayana Esequiba y su oro; y para los Estados Unidos Alaska y su oro.
A. ¿Los venezolanos se dieron cuenta de la maniobra?
M. ¡Francamente no! Ha habido que esperar muchos años para descubrir los documentos secretos y conocer los infames arreglos entre Inglaterra y los Estados Unidos. El Presidente de los Estados Unidos Grover Cleveland en su mensaje al Congreso el 17 de diciembre de 1895 aparentó que presionaba sobre Inglaterra para que aceptara someter la disputa sobre nuestra Guayana Esequiba a un tribunal internacional de jueces imparciales, como venía exigiéndolo Venezuela desde años atrás. Cuando los Estados Unidos aceptaron que ese tribunal estuviera compuesto de jueces ingleses, norteamericanos y un ruso, Inglaterra aparentó ceder.
A. Pero veo que no había ningún venezolano en la movida o en el guiso.
M. ¡Ahí está el detalle! Como no querían testigos de su arreglo secreto decidieron que ni uno solo de los jueces fuera venezolano. Deseaban tener las manos libres para toda clase de marramuncias.
A. ¿Cómo cuáles?
M. Comenzaron poniéndose de acuerdo sobre un tratado para someter la disputa sobre la Guayana Esequiba a un tribunal, pero excluyendo previamente, y de un manotazo, los territorios que los ingleses ya tenían ocupados y bajo control.
A. ¿Y Venezuela admitió eso?
M. Por supuesto protestó rechazando categóricamente el acuerdo anglo-yanqui. Pero el gobierno de los Estados Unidos le dijo: si no lo aceptas, tendrás que vértelas sola contra Inglaterra, y como Venezuela aún creía ingenuamente en la protección de los Estados Unidos, a regañadientes tuvo que firmar el Tratado de Washington en 1897.
A. Buena manera de protegernos tuvo Estados Unidos...
M. En efecto; fue puro teatro y cuento, o como escribió un funcionario británico "…es una farsa…". El Tribunal estuvo compuesto de dos ingleses (Russell y Collins) dos norteamericanos (Fuller y Brewer) y un ruso (Frederick de Martens) quien lo presidió. Aparentaron que prestaban atención a los argumentos pero al fin lo que hicieron fue negociar un arreglo secreto por el que dieron a Inglaterra La Guayana Esequiba, reconociendo a Venezuela sólo un pedacito que una revista inglesa ("Review of Reviews") dijo que no valía ni un billete de cinco libras. A ese arreglo lo llamaron "…Laudo…" o "…Sentencia Arbitral…" firmado el 3 de octubre de 1899 .
A. ¿Qué comedia?
M. Precisamente así la calificó el funcionario inglés Charles A. Harris al escribir "…todo ha sido una comedia…" De ese arreglo secreto informo Russell a su gobierno a los pocos días en documento secreto descubierto por los expertos venezolanos en 1963.
A. ¿Entonces los Estados Unidos e Inglaterra se burlaron de Venezuela?
M. Es la triste verdad. Éramos un país muy pobre, expuesto a los manejos de las grandes potencias. Pero no perdimos la dignidad. Por eso cuando Venezuela tuvo conocimiento de la comedia, denunció esas maniobras en las Naciones Unidas en 1962.
A. ¿Cómo vino a sospechar Venezuela de algo tan secreto como el llamado "…Laudo de París…" de 1899 que nos quitó La Guayana Esequiba?
M. La primera pista nos la dio uno de los abogados de Venezuela ante aquel tribunal, llamado Severo Mallet-Prevost, por cierto abogado de la "…Orinoco Steamship Co…" (Una compañía de navegación del Orinoco formada por ingleses y norteamericanos). Poco antes de morir dictó Mallet Prevost su célebre Memorándum (1944) en el que reveló algunos detalles del arreglo secreto contra Venezuela. Después los expertos venezolanos descubrieron otros muchos documentos aún en los propios archivos ingleses.
A. ¿Se convenció Inglaterra?
M. Mira, no hay peor sordo que el que no quiere oír. Al principio pretendió convencer al mundo de que Venezuela no tiene razón y que La Guayana Esequiba era parte de su colonia de Guayana Británica; después, como vio que se les estaba poniendo el asunto muy feo en las Naciones Unidas, aceptó discutir con Venezuela y firmó un tratado: El Acuerdo de Ginebra, en 1966. En esas discusiones también participó la que entonces era su colonia: Guayana Británica, hoy República de Guayana.
A. ¿En qué quedamos? ¿A quién reclamamos La Guayana Esequiba?
M. Muy sencillo; antes le exigíamos a Inglaterra que nos la devolviera. Como en 1966 la Guayana Británica se independizó de Inglaterra, desde entonces le exigimos a Guyana que nos devuelva La Guayana Esequiba porque es territorio venezolano usurpado por el colonialismo inglés.
A. ¿Y si no acepta discutir?
M. Está obligada por un tratado: el Acuerdo de Ginebra, llamado así por haber sido firmado en esa ciudad suiza donde los ingleses y los guyaneses se comprometieron con los venezolanos a buscarle una solución práctica a la controversia o disputa sobre La Guayana Esequiba.
A. Es decir, que algún día reconocerán que ese territorio pertenece a Venezuela.
M. Mira, hay que ser sinceros; la historia enseña que no ha habido ningún país que haya devuelto a otro el territorio que le quitó porque se convenció por los documentos de que ese territorio no era suyo.
A. ¿Entonces no hay esperanzas de que recuperaremos nuestra Guayana Esequiba?
M. Claro que sí. Más aún, estamos obligados a recuperarla porque nuestras diferentes Constituciones Nacionales nos prohíben ceder y aún alquilar parte alguna del territorio nacional y así lo ratifica la constitución de 1999.
Nuestra Independencia, la que nos ganaron con su sangre los Libertadores, no estará completa mientras haya territorios venezolanos como La Guayana Esequiba en poder de extranjeros. Nunca debemos olvidar aquella firme declaración del gobierno del Libertador: "…Este bello y rico país limita por la Mar del Norte (Atlántico) por el río Esequibo… "
A. ¿Pero ese territorio no está poblado de ingleses y sus descendientes?
M. Esos son poquísimos. La mayor parte de la población de la Guayana Esequiba son indígenas Arawak, Wapishana, Akawaio, Patamona, Caribe, Makushi, Pemón, Trio, Wai-Wai, Mawayana, Caribes y Guaraos, hermanos de nuestros Maquiritare, de nuestros Aruacos, de nuestros Pemones. No olvides que como nacidos en territorio venezolano son venezolanos. Muchos ignoran que lo son, pero otros sí lo saben y quieren que Venezuela recupere su territorio. Te he de revelar un dato impresionante: la mayoría de los indígenas de la Guayana Esequiba quieren ser venezolanos y en el año de 1969 participaron en la Revuelta del Rupununi sin que pudieran lograrlo su objetivo.
A. ¡Son héroes anónimos!
M. ¡Sí! Llegará el día en que los recordaremos con un monumento junto al río Esequibo. Pero antes debemos trabajar y trabajar para recuperar el territorio reclamado. Tenemos que informarles a los nacidos en la Guayana Esequiba que son venezolanos y darles a conocer nuestra Patria común, su linda historia de Libertadores, sus tradiciones, sus costumbres, su arte, su música, sus posibilidades económicas. En suma: tenemos que meter a Venezuela en el corazón de nuestros hermanos nacidos en la Guayana Esequiba.
A. ¿Y llegará el día en que la Guayana Esequiba sea parte de la Nación Venezolana?
M. Tenlo por seguro, porque no hay noche sin aurora.
A. ¿Entonces, cuál la organización político territorial de Venezuela?
M. Venezuela consta de veintitrés Estados, un Distrito Capital que
comprende la Zona Metropolitana de Caracas, las
Dependencias Federales (conformadas por mas de 311, islas,
Islotes, y Cayos en su mayoría deshabitados), Todo esto se
encuentra estipulada según el Artículo 16 de la Constitución de
la República, y el territorio de la GUAYANA ESEQUIBA (zona
Reclamada por Venezuela) O Zona en Reclamación de La
Guayana Esequiba que algún día será El Estado numero
Veinticuatro.

jueves, 15 de noviembre de 2007

Chávez regalará parte del Golfo

Maracaibo, Jueves 15 . 11 . 2007





Chávez regalará parte del Golfo

Nataly Angulo V. / noticias@laverdad.com
Manuel Hernández / noticias@lavedad.com

Las aguas del golfo de Venezuela ya no serán de exclusividad para la nación, pues Colombia tendrá derecho a una parte de ese rico territorio marítimo.

El Gobierno nacional cederá al país vecino dos mil 100 kilómetros cuadrados, aproximadamente, de los 27 mil kilómetros que posee el golfo de Venezuela. Pero, no sólo se trata de territorio, sino también de buenas reservas petroleras, pues ese pedacito de espacio -como se ilustra en el mapa- tiene al menos entre seis y siete mil millones de barriles de petróleo.

La información la suministró Juan Romero, experto en geopolítica y profesor de Historia de la Universidad del Zulia, quien por su conocimiento en la materia ha sostenido reuniones con representantes de la Cancillería y la comisión venezolana que adelanta las negociaciones con el país neogranadino.

''Se trata de continuar la línea recta de Castilletes, por encima de esa línea hay un espacio que es lo que se le va a entregar a Colombia, son aproximadamente unos dos mil 100 o dos mil 200 kilómetros cuadrados''.

Recordó que el golfo de Venezuela comienza en una línea recta imaginaria que se traza desde Punta Espada en la Península de La Guajira hasta Punta Macota en la Península de Paraguaná, debajo de esa recta -explicó- y hasta la entrada de la barra del Lago de Maracaibo comienza y terminan los 27 mil kilómetros cuadrados que comprende el golfo.

''El problema (limítrofe) es que cuando se firma el acta de Castilletes en 1902 y se comienza a delimitar la superficie terrestre sucede que de Punta Espada (donde comienza el Golfo) hasta donde comienza la frontera de Venezuela en Castilletes hay 36 kilómetros que están en la territoriedad de Colombia. Esos 36 kilómetros están dentro del golfo de Venezuela y que por el acta de Castilletes ese territorio está bajo la jurisdicción de Colombia''.

Acuerdo casi listo

El profesor adelantó que para que ambos gobiernos procedan a firmar el acuerdo hace falta delimitar los derechos internacionales que recaen en la soberanía, la zona económica exclusiva, la plataforma continental, el mar territorial y la zona contigua.

''El preacuerdo no se termina de consolidar porque las comisiones siguen trabajando, ya que hay un pequeño problema. Por encima de línea quedarían Los Monjes, que es territorio venezolano, y esta isla representa una plataforma continental y la zona económica exclusiva en mar territorial del país; por lo tanto, el acuerdo tiene que establecer un mecanismo a través del cual Colombia navegue y Venezuela a través de Los Monjes mantenga la zona económica exclusiva del mar territorial y la plataforma continental. Eso es lo que ha tenido hasta estos momentos sin concretarse el acuerdo, pero en líneas generales éste establece que Colombia reciba menos del 10 por ciento del Golfo''.

Todo por el petróleo

¿Por qué Colombia acepta dos mil 100 kilómetros cuadrados de espacio del Golfo, cuando siempre ha procurado tener más acceso? La respuesta para el profesor es sencilla: ''Por el petróleo, mi cálculo es que en el espacio que se le otorgará a Colombia pueden haber entre unos seis mil y siete mil millones de barriles, que es bastante''.

Indicó que Colombia posee pocas reservas de petróleo y gas, y que en el Golfo ''está comprobado'' que hay 1,8 veces más crudo que lo que existe en el territorio venezolano.

''Las reservas de petróleo en Venezuela son de 297 mil de millones de millones de barriles, es el principal país con reserva. Si nosotros producimos en estos momentos tres millones 200 mil barriles de crudo diario, nuestras reservas durarían para 103 años. Pero, las reservas en el Golfo son de casi 600 mil millones de millones de barriles, lo que significa que con el Golfo tenemos petróleo para producir 200 años más. Por eso es que Colombia acepta tener menos del 10 por ciento del territorio del Golfo''.

Diferendo

Juan Romero, experto en geopolítica e historiador, recordó que Colombia comenzó a exigirla a Venezuela parte del Golfo en los años 40 cuando descubre que en el espacio marítimo hay enormes recursos de hidrocarburos.

Indicó que durante el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez se instaló una comisión especial entre Venezuela y Colombia para estudiar una solución al problema de delimitación de aguas marinas y submarinas, luego de varios conflictos militares que se suscitaron como la entrada de una fragata colombiana en la isla de Los Monjes en 1954 y el ingreso a aguas del golfo de la corbeta Caldas en 1987.

Comentó que las comisiones continuaron su trabajo durante el gobierno de Rafael Caldera y también en el mandato del presidente Hugo Chávez, quien anunció que existían tales negociaciones con Álvaro Uribe, presidente de Colombia, en agosto cuando ambos mandatarios se reunieron en Bogotá y el mandatario neogranadino autorizó al jefe de Estado venezolano acordar un canje humanitario con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Dar poco o quedarse sin nada

Ítalo Luongo, analista internacional, aseguró a este rotativo que una negociación entre Caracas y Bogotá sobre el golfo de Venezuela no tendría resultados beneficiosos para la soberanía nacional, pues el territorio colombiano ''podría llegar a las rutas que tienen los barcos hacia el lago de Maracaibo, lo cual no es tolerable por ningún gobierno de Venezuela en principio, o por lo menos para los gobiernos de antes''.

Reiteró que la nación no tiene nada que acordar sobre las aguas del Golfo, porque ellas son de Venezuela y ''no deben ser negociable en ningún caso''.

Juan Romero, experto en geopolítica, dijo que este planteamiento es el mismo que en 1933 hizo que no aceptáramos el acuerdo de Colombia, en el cual se establecía que Venezuela tendría la potestad de la mitad de La Guajira. ''Por posiciones ultranacionalistas nos negamos al acuerdo colombiano y acudimos a instancias internacional que hizo que perdiéramos toda la guajira venezolana''.

Resaltó que por ello está de acuerdo en que se firme el mencionado acuerdo del golfo si Colombia está de acuerdo. ''Es preferible dar ese espacio del golfo a que más adelante cometamos otra estupidez como la que hicimos en la negociación que nos hizo perder La Guajira. Esa es mi posición''.

http://www.laverdad.com/detallenew.asp?mostrar=10&idcat=1&idnot=64565


Karem Holmquist H.